El
té verde es usado en los países asiáticos desde hace miles de años y es cada vez más consumido en los países occidentales por sus demostrados
efectos beneficiosos para nuestra belleza y salud.
El té verde se obtiene de las
hojas de camellia sinensis, al igual que el té tradicional, o té negro, con la diferencia de que las hojas se secan con vapor de agua o con calor, estando todavía frescas, conservando así los componentes antioxidantes.
La propiedad más conocida del té verde es la de ser un
potente antioxidante pero a su vez presenta otras características muy interesantes:
Antioxidante: los antioxidantes del té verde son los polifenoles, que evitan que los radicales libres deterioren los tejidos y el material genético del interior de las células, por lo tanto el té verde ayuda a retrasar el envejecimiento y a prevenir enfermedades cardiovasculares y cáncer. El té verde contiene también vitamina B12, C, D y K, minerales como el calcio, hierro, magnesio, potasio y cobre entre otros.
Diurético: ayuda a eliminar líquidos, estupendo en las dietas de adelgazamiento.
Lipolítico: disminuye la absorción de grasas en el intestino, y los niveles de grasa circulantes en sangre, útil en el control del colesterol y dietas de adelgazamiento.
Quemagrasas: favorece el metabolismo de las grasas.
Hipoglucemiante: disminuye la absorción de azúcares en el intestino y disminuye los niveles en sangre.
Astringente: debido a su contenido en taninos, ideal para las pieles con acné.
Beber té verde aporta claros beneficios a nuestra
belleza y salud, siendo uno de los más llamativos el de
retrasar el envejecimiento, pero no es la única forma en que podemos aprovechar todos sus beneficios. Hoy os propongo dos estupendos
tónicos naturales a base de té verde sencillos y efectivos que harán que tu piel se sienta, inmediatamente, más suave y revitalizada.
Tónico de té verde:
Ingredientes: un sobre de té verde, una taza de agua hirviendo y un disco de algodón.
Receta: Lo único que tienes que hacer es preparar el té como lo harías normalmente: dejar reposar la bolsita en el agua caliente y moverla un poco para que se disuelva el té. Una vez que el agua esté a temperatura ambiente, empapa el algodón en el té y, después de haberte lavado la cara, aplícate generosamente el té verde por el rostro y cuello. No es necesario que retires el tónico del rostro, aplicar la hidratante habitual tras la aplicación del tónico (una vez esté seco) como haces habitualmente.
El resto del té puedes guardarlo en la nevera en un frasco opaco para que no reciba luz directa y se conserven sus propiedades. Puedes usarlo durante una semana.
Tónico té verde y limón contra el acné:
Ingredientes: un sobre de té verde, una taza de agua hirviendo, unas gotas de zumo de limón y un disco de algodón.
Receta: preparar el té y añadir unas gotas de zumo de limón una vez esté a temperatura ambiente (si lo metéis en la nevera para que esté fresquito mejor que mejor). Aplicar en la piel limpia con un disco de algodón. Dejar actuar 5 minutos y aclarar.
Este tónico resulta estupendo para las pieles acneicas ya que a las propiedades astringentes del té verde se unen las antioxidantes de la vitamina C.
Dos tónicos sencillos de elaborar y altamente efectivos sobre la piel.
Y tú, ¿cómo aprovecharías las propiedades del té verde, bebido o aplicado sobre el rostro? ¿o quizá ambas? ;-)